Un domingo de una semana cualquiera, una mirada, una caricia... acompañada de una difícil pero dulce despedida.
Una carretera, con su negro asfalto llena de todo tipo de vehículos... los mísmos que desprenden ese humo... maloliente y de color grisaceo...
Multitud de gente paseando por esas immensas ramblas, en las que ho...y.... radia más que nunca el sol. Sus grandes pasos peatonales, esos edificios modernistas... sonrisas, prisas o simplemente indiferencia.
Y ese pasillo amplio y con escaleras son las que conducen a una despedida, y el regreso a esa, mi pequeña i querida ciudad...
Ese es el lugar del amor, de la ilusión, de la esperanza... ese es el camino al cambio.
Otra mirada, mil caricias, esos besos... una despedida... y ese "adiós" infinito y doloroso...
Quisiera poder parar el tiempo,parar ese tren... Desvanecerme entre la gente... alejarme de todas esas miradas agenas... y que todas las voces callen y desaparezcan...
Solo permanecer TÚ&YO....
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